- Denuncian como graves problemas el envejecimiento del profesorado y el deterioro de las infraestructuras.
- Señalan que “las universidades catalanas compiten en los rankings con universidades que tienen un mayor presupuesto que todo el destinado por la Generalitat al sistema catalán” y que si se mantiene la situación actual el sistema puede perder la excelencia: “Si no hay gente joven, esto se acabará, pero quizá se está acabando o se ha acabado”.
- Apoyan una rebaja de precios, que no puede ir en detrimento de la financiación.
Noticia en La Vanguardia.