Evolución global de la financiación pública y de los ingresos por matrículas y tasas
El Gráfico 1 muestra la evolución de los ingresos de las universidades catalanas entre 1996 y 2014. Se puede observar que la recaudación por matrículas y tasas ha supuesto entre un 12% y un 26% de los ingresos totales de las universidades. El resto ha provenido mayoritariamente de las transferencias corrientes y de capital, dentro de las cuales las transferencias de las administraciones públicas han representado más del 90% durante todo el periodo. Otros ingresos propios, y los obtenidos por enajenaciones patrimoniales o mediante activos y pasivos financieros, se han movido alrededor del 14-15% (fuera del año 2004, en que se produjo un movimiento excepcional de pasivos financieros).
El peso de las matrículas y tasas sobre los ingresos totales ha experimentado un ciclo muy marcado, con un mínimo en 2009 (cuando representaban un 12,4% de los ingresos totales) y un máximo el 2014 (cuando estimamos que han representado un 26%). El ascenso de los últimos años estuvo concentrado en los ejercicios 2011 y 2012. De 2010 a 2011 los precios pagados por los y las estudiantes pasaron de un 14% a un 17% del total de ingresos de las universidades. De 2011 a 2012 el salto fue de un 17% a un 25,6%. Según nuestra estimación provisional, como ya hemos indicado, en 2014 pueden haber llegado hasta un 26%.
Tal como se explica en el apartado anterior, las cifras de los ejercicios 2013 y 2014 son todavía provisionales. Los datos de liquidación definitiva publicadas por la UPC y la URV muestran que, efectivamente, el peso de los precios de matrícula y las tasas siguió creciendo en 2013, pero a un ritmo inferior. En la UPC pasó del 9,3% al 17,2% entre 2010 y 2012, y llegó al 19,5% el 2013. De acuerdo con nuestras estimaciones, en 2014 podría haber llegado al 20-21%. En el caso de la URV pasó del 10,3% al 20,6% entre 2010 y 2012, y llegó al 22,4% en 2013.
Por otro lado, los ingresos por transferencias, que proceden mayoritariamente de las administraciones públicas, han experimentado un movimiento inverso: de cubrir un máximo del 77,8% de los ingresos del sistema universitario catalán en 2009, cayeron al 66,9% en 2012. Todo indica que en 2014 la proporción ha sido aún menor.
Fuente: elaboración propia, véase el apartado “Metodología”. Nota: En el año 2004 se produjo un fuerte incremento del gasto total como consecuencia de un movimiento extraordinario de pasivos financieros para amortizar deuda. Para tener una visión más realista de la proporción que representaban las transferencias y las matrículas y tasas, y del porcentaje del coste de la docencia que efectivamente asumían los y las estudiantes, ese movimiento extraordinario se ha eliminado de los cálculos.
En la última fase de ese ciclo, la reducción de las transferencias recibidas por las universidades y el incremento de los ingresos por matrículas y tasas pagadas por los y las estudiantes ha coincidido con una caída sostenida del gasto total del sistema universitario público catalán. El Gráfico 2 muestra la evolución de esas magnitudes, expresando las transferencias públicas totales (corrientes y de capital, procedentes de la administración central y de la Generalitat de Cataluña) y las matrículas y tasas pagadas por los estudiantes entre 1996 y 2012 a precios constantes por estudiante equivalente[7].
Como se puede apreciar, el gasto total de las universidades públicas catalanas experimentó un crecimiento sostenido desde el año 1996 hasta 2009. Sin embargo, con el estallido de la crisis financiera en 2008, y los fuertes recortes de los presupuestos públicos que los gobiernos llevaron a cabo inmediatamente, el gasto universitario sufrió una rápida caída del 21% entre 2009 y 2012. Ello situó el gasto, en ese último año, a niveles similares a los de 2005/06 en términos reales, un retroceso equivalente, por lo tanto, a siete años. Ese recorte sufrido por el sistema universitario catalán es el resultado combinado de la fuerte reducción de los ingresos por transferencias públicas, que han caído un 45% entre 2009 y 2012, situándose a niveles similares a los de 2003 (un retroceso equivalente a nueve años), y la fuerte subida de un 47% de los precios pagados por los estudiantes en concepto de matrículas y tasas entre 2009 y 2012.
Fuente: elaboración propia, véase el apartado “Metodología”. Nota: para el año 2004 se ha aplicado la misma corrección que en el Gráfico 1.
Como resultado de esos cambios, la parte del coste de la docencia asumida por los estudiantes ha variado sustancialmente a lo largo del periodo. El Gráfico 3 muestra la proporción del coste total de la docencia que representa la parte pagada por los estudiantes en las universidades públicas catalanas. Tal como se explica en el apartado anterior, el coste de la docencia universitaria se ha estimado a partir del porcentaje de horas que, según la base de datos Winddat, dedica el profesorado de las universidades catalanas a esa actividad. Hemos estimado que dicho coste representa un 59% del gasto total de las universidades públicas catalanas, aunque hemos considerado conveniente ofrecer un rango más amplio (más/menos 10 puntos), dada la falta de información precisa sobre el coste de la docencia en el sistema universitario catalán, debido a la ausencia de contabilidad analítica. Por eso, el Gráfico 3 también muestra los resultados suponiendo que el coste total de la docencia fuera un 49% (línea superior del gráfico) o un 69% (línea inferior del gráfico) del gasto total universitario.
Fuente: elaboración propia, véase el apartado “Metodología”. Nota: para el año 2004 se ha aplicado la misma corrección que en el Gráfico 1.
Tomando como referencia el supuesto intermedio del 59%, las matrículas y tasas pagadas por los estudiantes habrían cubierto en promedio un 28% del coste de la docencia entre 1996 y 2014 (o entre un 24 y un 34%, dependiendo del supuesto que se aplique para estimar el coste de la docencia). Ese porcentaje también ha experimentado un ciclo muy marcado. Primero disminuyó de forma gradual, pasando de un 29,4% del coste total de la docencia en 1996 a un mínimo del 21,6% en 2008. A partir de entonces dicho porcentaje volvió a subir nuevamente, hasta llegar al 28,4% en 2011, y al 41,6% en 2012 (o entre un 36% y un 50% en los supuestos mínimo y máximo). Las cifras todavía provisionales de que disponemos para el conjunto de universidades públicas catalanas indican que los precios y las tasas que pagan los estudiantes podrían haber llegado a cubrir, como mínimo, un 43% del coste de la docencia en 2014 (o entre un 37 y un 52% de acuerdo con el rango de supuestos utilizados). De hecho, las cifras de liquidaciones disponibles para 2013, referidas a la UPC y la URV, apuntarían a un ritmo de ascenso más intenso todavía, puesto que entre el 2012 y el 2013 se pasó del 26,5% al 31,5% en la UPC, y del 31,9% al 33,9% en la URV[8]. Recordamos que, según el real decreto-ley 14/2012, se debería estar pagando sólo entre un 15 y un 25%, dado que la proporción de segundas o terceras matrículas sólo podría justificar, en todo caso, un ligero incremento sobre dichos porcentajes.
- [7] Según el último informe de la Sindicatura de Comptes de Cataluña sobre el gasto agregado de las universidades públicas de Cataluña, los estudiantes equivalentes a tiempo completo se definen como: “[la] equivalencia en estudiantes del número total de créditos matriculados por el conjunto de estudiantes de cada una de las titulaciones, dividido por la media de créditos que un estudiante tiene que cursar cada año para finalizar sus estudios en el tiempo mínimo previsto” (2013, p. 18).↵
- [8] El real decreto-ley 14/2012 prevé unos precios porcentualmente más altos en el caso de algunos estudios de máster que en los estudios de grado. Para comprobar que nuestros resultados no están dominados por el incremento de los precios de los masters, hemos repetido el ejercicio anterior pero contabilizando sólo los ingresos provenientes de los títulos de grado y antiguos primeros y segundos ciclos. El porcentaje que los ingresos de grado y antiguos primeros y segundos ciclos representan sobre el total de ingresos por tasas y precios públicos se ha estimado a partir de los presupuestos de cada universidad, dado que las liquidaciones no aportan esa información desagregada. Los resultados se pueden ver en el Anexo 2. La evolución y el porcentaje que representan las aportaciones de los estudiantes son similares a los del Gráfico 3.↵
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La reforma universitària de Wert afavorirà el negoci dels màsters | CGT-UOC · 5/marzo/2015 at 19:01
[…] el que paguen els estudiants per curs universitari és molt inferior al que s’hi paga aquí. L’informe La financiación de las universidades públicas en Cataluña, 1996-2014, de l’Observatori del Sistema Universitari, revela que, mentre les aportacions dels estudiants a […]
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