La iniciativa incluye una prórroga de cinco mesos para los contratos pre y postdoctorales activos durante la pandemia.

Entre las ayudas, destacan actuaciones de apoyo a grupos de investigación, actuaciones específicas de transferencia del conocimiento, de apoyo a proyectos de investigación internacionales, apoyo a empresas basadas en la transferencia del conocimiento, revistas de divulgación de la Universidad, para organizar congresos, patentes, la internacionalización de la investigación, para la reparación de material científico y la adquisición de equipos de protección individual (EPI), entre otros aspectos.

“Todo esto se hace por una doble razón, por un lado para impulsar la investigación y la innovación en estos momentos de crisis, y también porque, al principio de la pandemia, todos los grupos de investigación y departamentos de la US recopilaron y donaron todo el material que tenían”, señala el vicerrector de investigación de la US.

Para poder llevar a cabo estas acciones, la Universidad ha tenido que reajustar el presupuesto anual de 9 millones de euros con el que cuenta el Plan Propio de Investigación y Transferencia de la US.

“En la crisis anterior se equivocaron, actuaron mal. A partir de 2012 y durante varios años, la inversión en investigación fue de cero euros. Hay indicadores que nos hacen pensar que la inversión va a volver a caer, pero debemos aprender del pasado. Debemos analizar que se hizo en la crisis anterior en otros países y actuar. No podemos esperar a que otros hagan una importante labor investigadora e innovadora mientras nosotros esperamos sentados”.

Noticia en el Diario de Sevilla

Categories: Notícies