- Le atribuían propiedades curativas contra el cáncer.
- El producto se había desarrollado en las instalaciones universitarias y lo había registrado una empresa spin-off de la Universidad.
- Los pagos de los enfermos se enmascaraban como donaciones a una fundación que habían creado.
- El importe de la estafa ascendería a más de 600.000 €.
- Al parecer, los profesores preparaban la comercialización de un falso medicamento contra el Alzheimer.
Noticia en La Vanguardia.